15 DE JUNIO DÍA DEL CHIMAYCHI Y LA PINTAYBATA EN LA PROVINCIA POMABAMBA – ÁNCASH – PERÚ.
Mediante Ordenanza Municipal N° 016-2016-GPP, de fecha 14 de septiembre del 2016, el burgomaestre de aquel entonces doctor Julio Azaña Muñoz declaró a la fecha 15 de junio, de cada año como el «Día oficial del chimaychi y la pintaybata», precisando en el artículo segundo del mencionado acto resolutivo, se haga de conocimiento de todo el público en general, en los distritos, provincias, a nivel nacional y mundial de este acuerdo que reafirma y nutre nuestro acervo cultural.
Al tiempo, se instauró también los llamados “Domingos chimaycheros” a fin de que se baile el Chimaychi o chimayche por los miembros de cada institución encargada de los izamientos cívico – patrióticos dominicales en la plazoleta de El Convento, hoy Parque de la Identidad Pomabambina, con la finalidad de promover su difusión, valoración y conocimiento.
Desde aquella fecha han pasado algunos años, entre estos, los dos últimos donde la pandemia nos mantiene en ascuas y luto cotidiano. Hemos perdido personas muy valiosas que formaban parte del acervo cultural de la provincia.
Cuántos sueños e ilusiones, cuántos proyectos van quedándose truncados al cegarse la vida de nuestros cultores. A los que aún quedamos en este mundo no nos queda otra cosa que honrar la memoria de aquellos que nos antecedieron en este terrestre suelo.
Con este agridulce motivo, ofrezco algo del chimaychi y una oda a la pintaybata, prenda genuina de Pomambamba, corazón de los Conchucos.
ETIMOLOGÍA DEL CHIMAYCHI:
La palabra “Chimaychi” proviene de dos voces quechuas:
“Chi”: verbo, que significa: “Hacer que alguien haga algo o que todos hagan algo…”; y,
“May”: adverbio, que significa: “Dónde…” o “en dónde…” (Maychà: dónde será o maychù, dónde es…)
En este caso a “Chimay” se le ha añadido como seudo sufijo y refuerzo, la raíz – prefijo independiente “Chi” resultando: Chimay – chi.
Lo que vendría a ser:
Prefijo “Chi”: Hacer que alguien haga algo o hagamos todos algo…..
Raíz “May” o “Maychú”: ¿Dónde? ¿En dónde? ¿Aquí o allá, acá o acullá?
“Chi” (Prefijo que actúa como sufijo o seudo sufijo dándole énfasis o refuerzo a la palabra: “Chimay”) Entonces, “Chi” equivale a decir: Hagamos algo todos… aquí, acá, acullá, allá o allí; pero, ¡hagamos!
En síntesis, la palabra “chimaychi” etimológicamente hablando significa: hagamos todos algo aquí… cantemos y bailemos o hagamos jarana todos aquí…
Por otra parte, el profesor Ebert Álvarez Salinas, y el maestro Eulolio Escudero Caldas, nos dicen acerca de la etimología del “Chimaychi” lo siguiente:
– Que es originaria del vocablo quechua “PIMAYCHI” que atribuye a la expresión artística “de todos”.
– Deriva de la palabra “ICHIMAY”, que antiguamente significaba “párense todos”, una palabra quechua en modo indicativo, cuasi imperativo que invitaba al colectivismo para el momento festivo.
…
ODA A LA “PINTAYBATA”
Una bella pradera
a la luz claro-obscura, en la penumbra,
que se mueve ligera
cuando a pasos enrumba,
es la pintaybata en la andina rumba.
¡¡Oh! linda pintaybata
por primorosas manitas bordada
con hilos de oro y plata,
linda luces, atada,
de la grácil cintura de mi amada!!
Cuando ella baila y canta
el alegre chimaychi en los días festivos,
su tesitura encanta
con cumplidos motivos,
rememorando, encuentros emotivos.
¡Oh linda pintaybata!
Hermosa prenda ancestral y nativa,
que al deleite arrebata
con ternura emotiva
y vestirla a las damas los motiva.
¡Abrigo, talar, adorno,
que primorosa el regazo cubres
de contorno a contorno
y en silencio descubres,
cuánto de arte y magia encubres!
Eres la prenda hecho arte,
eres arte hecho prenda abrigadora,
orgullo de esta parte
que deleita y adora
y el pueblo en conjunto la atesora.
Eres el tierno abrigo,
sobre la cual muy dulce amamanta
al bebé que consigo
abrigado en su manta,
lleva la madre, con amor, que encanta.
Con encanto y orgullo,
con gestos de nostalgia y belleza,
al liviano murmullo
de su innata grandeza
que refleja materna gentileza,
a su taller sentadas,
nuestras andinas musas del buen arte
llevan siempre grabadas,
repujadas por Marte,
en sus dulces entrañas este arte.
Tomando a la aguja
por pincel, y al hilo como inacabable
fluido de burbuja,
te pintan ternura afable
¡Oh! ¡Prenda hermosa, linda, inigualable!
En tu estampa reposa
con inmortal recuerdo y ternura,
la labor primorosa
y llena de hermosura
de tus bellas creadoras, la dulzura.
Florece en ti la impronta
de la artesana Trinidad Moreno,
tan antigua y no pronta,
de O. Cirilo Moreno
y de Rosenda Sánchez, en estreno.
La adornan, Julia Meza,
la sin igual Juanita Cueva Pozo,
cuya última destreza,
nunca encuentra reposo
en las dos alas de este arte precioso.
La completa, oficiosa,
“Doña Gaulli” y Luzmila Escudero;
mucho más provechosa,
al bello jardinero,
doña Ord Alicia Ponte, al son del florero.
¡¡Bien! doña Segundina…
con doña Feli López van bordando
con aguja muy fina,
van de a poco pintando,
otra nueva, ¡qué linda va quedando!
Aferrada a la vida,
también, Olinda siempre va bordando…
y pintando se olvida
de lo que va llevando
y así va a los reveces derrotando.
En tu trama pervive
la constancia obsesiva en el trabajo,
la cultura revive,
es nuestro gran legajo,
tan repleta de flores, de arriba, abajo…
Y te pinta la niña,
la joven, la soltera y la anciana,
¡Oh florida basquiña!
de magia provinciana!
que en país de los Chucos viste Diana.
¡Oh linda pintaybata!
de lana fina y bayeta teñida
que a su cintura ata
mi paisana engreída
luciéndola feliz y entretenida.
¡Qué lozana, floreces
trinitarias, geranios, margaritas!
y entre aquellas meces
frágiles mariquitas,
abigarrando a las maripositas.
¡Cómo lucen las dalias,
el “Corpus huayta” y la espiga de trigo!
descalzas, sin sandalias,
a las rosas bendigo,
y una hoja partida, yo consigo.
¡Oh linda pintaybata!
primoroso jardín del universo,
que tierna se aclimata
al lago azul y terso
y al cáliz sacrosanto de mi verso.
A Flora y su floresta,
siempre primaveral, bella floreces;
de mi andina Vesta
en su regazo meces
cada dulce mañana que amaneces.
La dulce Primavera,
nace de tus entrañas cada día;
como una enredadera
que en tu jardín había,
con caricias de Céfiro al día.
¡Oh linda pintaybata!
Prenda nativa orgullo de mi tierra,
representante grata
que mi orgullo encierra
en las dulces entrañas de mi sierra.
Auténtica y nativa,
cruzando cielos llegas siempre ligera
patriótica y festiva
como nuestra bandera
a tierra lejana y extranjera.
¡¡Oh linda PINTAYBATA
eres la más hermosa y bella prenda,
que a su cintura ata
como una eterna ofrenda
la “SHUMAQ SHIPASH” en cada contienda!!
Del libro inédito «Homenaje de Pomabamba»
Fredy H. Vara Reynoso.
«El Cisne de los Andes Peruanos»